Centro de educación Integral

LOGOPEDIA - PSICOLOGÍA - EDUCACIÓN EMOCIONAL

Miguel Moya 16, 2ª Planta 29017 Málaga

Acoso escolar o Bullying

El acoso escolar o bullying es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre escolares de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado. Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es el emocional y se da mayoritariamente en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas de los casos de acoso escolar suelen ser niños y niñas en proceso de entrada en la adolescencia (12-13 años), siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas. El acoso escolar es una forma característica y extrema de violencia escolar.
Ya abordábamos anteriormente el tema de la Violencia en las aulas desde un enfoque preventivo de intervención educativa, espacio donde se hace imprescindible la identificación del problema y la actuación profesional correspondiente.
Hablar de bullying, implica tener en cuenta tres componentes clave, recogidos del artículo que trata sobre el acoso escolar de la guiainfantil.com :
  1. Un desequilibrio de poder entre el acosador y la víctima. Este desequilibrio puede ser real o sólo percibido por la víctima.
  2. La agresión se lleva a cabo por un acosador o un grupo que intentan dañar a la víctima de un modo intencionado.
  3. Existe un comportamiento agresivo hacia una misma víctima, que se produce de forma reiterada.
Esta problemática ha llegado a la gran pantalla: “ParaNorman”, una película animada que es un alegato en contra del maltrato escolar y la primera gran producción de la industria del cine en poner este tema en el centro del guión.
Tal como indica el artículo en la web BBC no se trata de un discurso acartonado o un ensayo pedagógico sobre cómo tolerar al que es diferente, sino una cinta de terror para niños que llevó tres años crear y fue hecha con el complejo método de animación stop-motion.
“No es el maltrato burdo de ser golpeado todos los días por un compañero, es uno más sutil que todos, en mayor o menor medida, practicamos: un acoso basado en cómo hablas o la ropa que usas o el color de la piel. Pensamos que era un buen material crudo para un filme infantil”, señala Chris Butler – guionista y co-director.

La película, que se estrena este viernes en Estados Unidos, ha sido además pionera en el uso de “impresoras 3D”, que generan objetos tridimensionales en silicona a partir de un dibujo hecho en computadora. La cinta llegará a España en diciembre.

Ahí va el trailer como adelanto…

Violencia de género. Aproximación al problema.

24 junio, 2009por teresalv en aprender para ser, coeducación, convivencia, orientación
La violencia de género es un grave problema que está exigiendo un análisis amplio de sus causas y de las consecuencias que está teniendo para las mujeres, lo cual permita adoptar medidas preventivas y paliativas eficaces. La gravedad del hecho se ve incrementada por el gran número de mujeres a las que afecta, pues no sólo la abrumadora cifra de víctimas mortales en nuestro país, a manos de sus excónyuges, maridos o compañeros sentimentales, sino que éstas, son sólo la punta del iceberg de las miles de mujeres que sufren algún tipo de violencia simplemente por el hecho de serlo.
[…]

Bajo la terminología de violencia de género se pretende destacar la importancia que tiene la cultura, la mentalidad, en la misma: es decir que no es casual el hecho de que sean mayoritariamente los hombres los que agreden a las mujeres, pues el género, lo que se piensa que tiene que ser un hombre o una mujer, del agresor y de la víctima, van ligados a la explicación de dicha violencia; ésta, de hecho se produce como resultado de un proceso de dominación que sustenta, que estructura y que determina, el rol social de hombres y de mujeres y las relaciones entre unos y otras.

[…]

Existen además una serie de características, típicas de las diversas formas de ejercer la violencia contra las mujeres, que diferencian este tipo de violencia de cualquier otro. Me voy a referir a seis de ellas:

  1. Importancia del componente social, de la cultura, de la educación, ya que no ha renunciado en la práctica a la desigualdad entre hombres y mujeres, y contribuye a mantener su situación de inferioridad. La violencia contra las mujeres se ejerce como resultado de la idea de superioridad masculina y de los valores que forman parte del código patriarcal.
  2. Tiene un carácter instrumental al ser ejercida como medio de dominación y control social. Según la declaración de las Naciones Unidas en la última Conferencia Mundial sobre la Mujer (Beijing, 1995), la violencia contra las mujeres es consecuencia «de las relaciones de poder históricamente desiguales entre hombres y mujeres, que han conducido a la dominación de la mujer por el hombre, la discriminación contra la mujer y la interposición de obstáculos contra su pleno desarrollo». Para este hecho no hay ningún argumento biológico, sino el que culturalmente se han establecido unas tareas, unos roles de género que se interpretan de una forma desigual.
  3. Es estructural e institucional, al ser una consecuencia del entramado de las sociedades patriarcales, impregnando la cultura que difunden y las instituciones desde las que actúan, pues todas ellas tienen una manera de definirlas identidades y las relaciones entre hombres y mujeres que, no sólo producen que muchos individuos ejerzan la violencia contra las mujeres, sino que, lo que es más significativo, las posibilitan y hasta hacen que la sociedad demuestre un nivel de tolerancia que nos debe asustar.
  4. Se trata de un fenómeno social transversal a todas las clases sociales -se produce en todos los niveles socioculturales y socioeconómicos– y puede aparecer en las diferentes edades del ciclo vital de las personas.
  5. Es ideológica, ya que está influida y sustentada por la ideología patriarcal, perpetuada por la violencia simbólica, que funciona como mecanismo de control para que las mujeres la permitan. Las mujeres, al asumir los valores del patriarcado, se consideran en situación de inferioridad respecto a los hombres. Por un lado, el miedo a romper las reglas, a ir en contra del poder masculino y por otro, el considerarse inferiores y en obligación de obedecer, actúan como mecanismo de control para mantener las desigualdades establecidas.
  6. Pasa desapercibida y es difícil de advertir, de hacerla visible, de denunciarla, de reconocerla como problema y de definirla. No se hace evidente para todo el mundo en nuestra sociedad, la cual desacredita en muchas ocasiones a las personas que mediante investigaciones realizadas desde diversos ámbitos, instituciones u organismos, público o privados, la ponen de manifiesto.

Fuente: GUERRA GARCÍA, Mónica: «Prevención de la violencia de género desde edades escolares». Universidad de Sevilla. Publicado en FLECHA GARCÍA, Consuelo; GUERRA GARCÍA, Mónica; NÚÑEZ GIL, Marina (2003): Educación y Mujeres. Estrategias de Intervención. Arcibel Editores.

Violencia en las aulas

La raíz del problema de la violencia está clarísimamente señalado por Gardner, en su teoría de las inteligencias múltiples, al recordar que la inteligencia interpersonal, la que necesitamos para relacionarnos bien, está en los lóbulos prefrontales, en la parte de nuestro cerebro que ha sido la última en desarrollarse en la evolución. […]
La solución de raíz es enseñarles a relacionarse asertivamente, es decir, con eficacia y justicia.

Todos los expertos, tanto profesionales de la educación como de la psicología, están de acuerdo, en que para relacionarnos bien necesitamos saber pensar, necesitamos reconocer y gestionar nuestros sentimientos y necesitamos haber adquirido los valores morales básicos. Estos tres factores, el cognitivo, el emocional y el moral, nos llevarán infaliblemente a relacionarnos con los demás asertivamente, es decir, con eficacia y justicia. Eficacia es un concepto cognitivo: saber distinguir, entre varias alternativas, cuál es la mejor para lo que intentamos conseguir, cuál es la que producirá esa consecuencia eficaz que buscamos. En cambio, justicia es un concepto moral: entre las diversas alternativas, será justa la que no lesione los derechos ni la dignidad de otros. Actuar con eficacia y justicia es actuar humanamente, como persona, no como un bobo (ineficacia), no como un bruto (injusticia). […]

En esto hay acuerdo de todas las partes, pero al diseñar programas educativos concretos, unos expertos han subrayado lo cognitivo, otros lo emocional, otros lo moral y otros incluso han querido llegar directamente a la asertividad, sin entrenar previamente en los tres campos anteriores.

[…] podemos afirmar con fuerza que para formar personas necesitamos educar a los jóvenes y a lo adultos en ese triple campo mencionado: el cognitivo, el emocional y el moral. Sólo lo cognitivo no basta; sólo lo emocional no basta; sólo lo moral no basta. Hacen falta los tres. Si conseguimos educar bien en los tres, entonces las habilidades sociales, entendidas como asertividad, es decir como eficacia y justicia, fluirán sin esfuerzo.

Lee el artículo completo: SEGURA MORALES, Manuel: «Enseñar a convivir no es tan difícil». Ponencia presentada en el Congreso «Disrupción en las Aulas: Problemas y soluciones», celebrado en el Hotel Meliá Castilla y organizado por el MEC en Marzo de 2006 en Madrid.

Archivo

LOCAL